Dos días antes de que Maryori Muñoz Sánchez muriera víctima de un ataque con químico a manos de su expareja, Luis Carlos Aguirre Echeverri, de 68 años, un comisario de familia de Sabaneta, Antioquia, en donde ocurrieron los hechos, había emitido una orden de protección a favor de la mujer de 40 años.

La víctima de este nuevo feminicidio que todo el país está repudiando, falleció este miércoles a la 1 p.m. minutos después de que Aguirre llegara al piso 11 del centro comercial Mayorca, en Sabaneta, Antioquia, en donde ella administraba un centro de estética, y le arrojara en su rostro un polvo químico que le produjo la muerte.

El atacante también falleció.

En febrero pasado, Maryori había interpuesto una denuncia ante la Comisaría de Familia de Sabaneta por las constantes agresiones que venía recibiendo de su expareja en los últimos seis meses y de quien se había separado recientemente, tal como lo informa el diario El Colombiano.

La situación llegó a tal extremo que la administradora de empresas de 40 años egresada de la Fundación Universitaria María Cano, decidió mudarse hace seis meses de Sabaneta junto a sus dos hijos hacia la Comuna 13 de Medellín.

Los familiares y compañeros de trabajo narraron a la autoridades que el feminicida iba constantemente al centro de estética para amenazarla.

Finalmente, el comisario emitió una orden de protección el lunes 15, es decir, 48 horas antes de este nuevo feminicidio en Colombia.

De acuerdo con la medida, Aguirre Echeverri no se le podía acercar a Maryori en ninguno de los espacios que ella frecuentara,  y que debía someterse a un tratamiento “reeducativo y terapéutico”, reveló El Colombiano. Ese sería el detonante para que el hombre le diera muerte.

“Era una relación muy disfuncional, donde frecuentemente se separaban y luego volvían a convivir. Esa una situación marcada por constantes casos de violencia intrafamiliar”, declaró el secretario de Seguridad de Sabaneta, Mariano Atehortúa.